En el cielo las nubes son sordas.
Director: Tom Tykwer
Guión: Krzysztof Kieslowski, Krzysztof Piesiewicz
Protagonistas: Cate Blanchett, Giovanni Ribisi
País: USA, UK, Francia, Alemania, Italia
Duración: 97 min.
En Heaven, el silencio es un protagonista. El silencio habla y dice mucho más que los parlamentos. Las imágenes y las expresiones nos revelan los elementos claves de esta historia sencilla y compleja a la vez, construida con exactitud matemática. Es un “thriller” elaborado con las precisiones propias del género. Sin embargo el silencio, el manejo del suspenso y la extraordinaria visión de Tom Tykwer (director de Corre Lola Corre y El Perfume) hacen de Heaven una película de emociones contenidas, que jamás alcanza un clímax explosivo.
No se trata sólo de la minuciosidad del guión. La cámara y la música son también exactas e indispensables para atrapar al espectador y hacerlo cómplice de Philippa, personaje interpretado magistralmente por Cate Blanchett. Quizá nos hemos sentido como ella, incapaces de aguantar más la indiferencia de la gente o la doble moral y la hipocresía de quienes dicen protegernos o representarnos. Pero son sensaciones momentáneas. Es un malestar que debemos olvidar pronto, tal vez porque no queremos hacer nada. Nos sentimos impotentes y eso nos vuelve realmente incapaces. No es el caso de Philippa, ella decide actuar. Su inexperiencia la llevará a cometer un error que no la dejará tranquila. Pero no por eso dejamos de admirar su osadía, involucrados ya con su causa.
No sabemos qué hay más allá del cielo. La cámara en Heaven nos sugiere que el cielo mira hacia abajo, que es un mudo testigo de lo que está pasando. Pero no hace, no puede hacer nada más. Son cosas de los mortales. Si es que hay una justicia divina no tiene jurisdicción sobre la tierra. Cada quien debe encontrar la mejor solución a sus problemas. Hemos confiado al cielo algo que sólo nos compete a nosotros. Hemos olvidado que sólo nos tenemos unos a otros para protegernos. Somos nosotros quienes debemos encontrar la solución de nuestros problemas, de la mejor manera posible.
Philippa es una asesina. También es la viuda de un drogadicto que murió por sobredosis. ¿Cómo confiar en ella? Es difícil creer en una mujer que parece haber enloquecido por el resentimiento. A primera vista Philippa no es más que una víctima de sus emociones, una mujer confundida, “sea como sea, es culpable”. Sin embargo Filippo confía en ella, sus razones nos son sugeridas a través de los gestos. Es amor, claro. Es solidaridad también, quizá el deseo de participar de su actitud valiente, de su deseo de hacer justicia. No alcanzamos a entenderlo completamente pero no importa porque la dirección es excelente. El tono íntimo con el que se nos narra la historia hace su final perfectamente plausible. Ellos están juntos, ahora sólo se tienen el uno al otro y sin saber qué hacer intentarán subir al cielo.
Heaven es un “thriller” sorprendente por su discreción. No aparece aquí el escándalo, la lluvia de balas o el ruido de los diálogos vacíos tan común en las películas norteamericanas del género. Tykwer convirtió este tipo de historia en un viaje de belleza interior, de dolor, desolación e impotencia por medio de dos seres callados. Quizá en el cielo las cosas son así, no se pueden entender completamente pero se perciben de tal forma que realmente las palabras sobran. En la tierra las esperanzas nos sepultan antes de verse cumplidas, quizá en el cielo no es así.. El cielo sabe que las nubes son sordas y los mortales indiferentes.